La
catástrofe ecológica provocada por
el hundimiento del barco petrolero
Prestige se agravó a partir del 6
de diciembre, al comenzar a
derramarse el fuel oil que quedó
dentro del casco, hundido a casi
250 kilómetros de la costa
atlántica española.
El Prestige se averió el 13 de
noviembre en las cercanías de la
costa de la comunidad autónoma de
Galicia y al día siguiente fue
remolcado a alta mar, donde se
hundió el 19 de ese mismo frente
al cabo de Finisterre, que marca
el extremo occidental de la
Península Ibérica. |